El informe de la Agencia Internacional de Energía (AIE) presenta los indicadores clave de la mejora de la eficiencia energética y el desarrollo de políticas en todo el mundo.
Para lograr objetivos básicos como la reducción de las facturas de energía, el aumento del acceso a la energía, la mejora de la seguridad energética, el cambio climático y la contaminación del aire, una política energética sólida es fundamental.
Dos tercios del consumo de energía de los edificios que se construyen hoy en día no responde a códigos o normas. En la mayoría de los casos, las mejoras en la intensidad de la energía y la eficiencia energética están todavía lejos de alcanzar los objetivos climáticos.
Este informe de AIE se centra en la comprensión de las tendencias globales en materia de eficiencia energética y el seguimiento del estado de la intensidad energética, la inversión en eficiencia energética y su impacto.
Puntos destacados:
En cuanto a los edificios, el informe indica que la inversión en eficiencia energética se ha incrementado de forma global, incluyendo electrodomésticos e iluminación, hasta los 118 mil millones de dólares en 2015. El gasto total en productos y servicios de eficiencia energética en edificios en todo el mundo fue de 388 mil millones de dólares en 2015, lo que representa el 8% del gasto total en la construcción de edificios, un porcentaje que ha ido en aumento.
La inversión en eficiencia energética en los edificios es impulsada por las políticas, más que por los usuarios finales (propietarios o arrendadores).
La envolvente del edificio representa la mayor parte de la inversión en eficiencia energética de los edificios, siendo de 237 mil millones de dólares, principalmente en aislamiento y ventanas.
Durante el período 2000-2015, se logró a nivel mundial un 37 % y un 26% de mejora en el consumo de energía por metro cuadrado en edificios no residenciales y edificios residenciales respectivamente.
Todavía hay varios factores que ejercen presión al alza sobre el uso de energía, como el crecimiento demográfico, el aumento en el tamaño de las viviendas y una reducción en el número de ocupantes por casa, a menudo asociado con el aumento de los ingresos.
El informe demuestra que las políticas deben reforzarse y ampliar su cobertura para impulsar el potencial de la eficiencia energética.
A través del análisis, la orientación política y el intercambio de conocimientos entre todos los interesados, la AIE tiene como objetivo apoyar a los gobiernos de todo el mundo en la aplicación y la comprensión de las políticas de eficiencia energética.
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